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Edificios con vida

Cuando en el 2006 me inicié en el camino de la Bioconstrucción me llegaron unas fotocopias que me han acompañado hasta hoy y que quiero compartir y no perder. Un artículo que firman Los Verdes (Parlamento Europeo) y la Asociación Española de Bioconstrucción.

“Toda actividad humana ha de partir del reconocimiento y la dignificación de nuestro frágil y amenazada casa terrestre, nuestro único y común hogar, lo que a su vez exige la responsabilidad moral, política y técnica de preservarlo y protegerlo en óptimas condiciones para la salud, la felicidad y el futuro. Nuestra interdependencia con la naturaleza ha de expresarse en los hábitats construidos mediante la puesta en práctica de los valores de respeto y cuidado hacia ella y hacia los seres vivos que la habitan. Una nueva conciencia de cultura planetaria podría ampliar y orientar nuestro sistema de pertenencia y de conexión con la Madre Tierra hacia formas de vivir más pacíficas, justas y saludables. Las viviendas y edificaciones también deben adaptarse a nuestras necesidades más vitales como si fueran una segunda piel y deben procurarnos el cobijo y salud que necesitamos.

La bioconstrucción es una forma de construir respetuosa con los seres vivos y con los ecosistemas terrestres que favorece los procesos evolutivos de los seres vivientes y la biodiversidad garantizando sus equilibrios dinámicos y su capacidad autogenerativa. Con las prácticas bioconstructivas se minimizan los daños ambientales mediante una sabia gestión del suelo, el agua, el aire, la energía y los residuos. Mediante la generación y regulación eficiente de los recursos empleados en las edificaciones se evita la contaminación y el agotamiento de los bienes naturales y a la vez se consiguen unos hábitats más saludables y cómodos en armonía con el entorno biofísico.”

Gracias Joan Vives por la foto del “Espai de Benestar” que diseñamos hace ya unos años.

Los edificios están en el lugar adecuado cuando se evita la proximidad a fuentes emisoras de contaminación eléctrica, electromagnética, química y acústica como son las fábricas contaminantes, las grandes vías de transporte, los tendidos de alta tensión, las subestaciones y centros de transformación, etc. Las condiciones geobiológicas de los asentamientos no han de tener fallas geológicas, ni corrientes de agua. Las edificaciones no han de levantarse en zonas donde se ponga en peligro algún ecosistema valioso. Si ya se ha construido en una ubicación no apropiada, se debería tomar medidas preventivas y compensatorias en cualquier modificación y rehabilitación para minimizar los peligros y daños.

Los edificios no han de significar una ocupación autoritaria del lugar sino una integración que tenga en cuenta la morfología y necesidades del terreno, las construcciones adyacentes, los estilos arquitectónicos tradicionales y las formas constructivas de la zona. La gran mayoría de edificios deber ser “dignos miembros del coro” en lugar de aisladas “primas donas”.

La vivienda y edificios han de servir a las necesidades de los usuarios mediante la comunicación continuada con el proyectista. Se procurará cuida el efecto “onda de forma” evitando los elementos excesivamente rectilíneos y con esquinas pronunciadas. Tampoco son convenientes los materiales muy rígidos y tensionados, y las grandes luces se pueden salvar con arcos, bóvedas, etc. Las proporciones espaciales, así como las formas y colores juegan un gran papel de armonización del lugar.

En la creación de espacios se integraran los criterios funcionales de distribución de servicios junto a las consideraciones bioclimáticas y de ahorro energético. Se perseguirá en lo posible una buena orientación con estancias de poco uso al Norte (garajes, despensas, escaleras, etc.) y zonas de día al Sur. Se proyectaran acristalamientos para el máximo aprovechamiento térmico y lumínico mediante paredes y suelos de alta inercia térmica. Una especial atención a los lugares de descanso exige evitar que en la vertical de los mismos transcurran conducciones de electricidad, agua o de cualquier otro tipo.

La respiración urbana se favorece con el empleo de materiales saludables, biocompatibles e higroscópicos que facilitan los intercambios de humedad entre la vivienda y la atmósfera. Los materiales empleados deben ser de la zona y han de ser lo menos elaborados posible, deben encontrarse cerca de la obra, y no deben contener elementos nocivos como son el asbesto, poliuretano, cloro, PVC, etc. Se evitara los aislamientos y pinturas de poro cerrado, plastificados, elementos retenedores de polvo electroestático (moquetas, suelos plásticos, etc.) y los materiales que emitan gases tóxicos en su combustión. Se deben usar pinturas al silicato, al agua, aceite de linaza, colofonia, ceras naturales, etc. Para los elementos decorativos lo mejor son los tratamientos de madera, o lucidos y enfoscados. En los elementos estructurales se deben emplear cementos naturales o cal hidráulica. El uso de acero debe restringirse a lo imprescindible y deberá ser convenientemente derivado a tierra. Se suele abusar del  hormigón armado en elementos estructurales como vigas, pilares y forjados. Sobre todo en las viguetas pretensadas que contienen acero una tensión-torsión permanente, pero el hormigón armado puede sustituirse por muros autoportantes, cerchas, arcos y bóvedas.

Los conductos de saneamiento de gran diámetro pueden ser de cerámica con conexiones de caucho y los de pequeño diámetro de polipropileno (PP), de polibutileno (PB) o de polietileno (PE). Con estos materiales sin PVC, las condiciones son más estables, flexibles, duraderas y menos ruidosas.

Para las conducciones eléctricas existen cables libres de halógenos y sin PVC, así como tubo-rizo de polipropileno.

Con un uso más racional del hormigón armado. Hay muchas razones para evitar en lo posible el uso del hormigón armado. Por un lado, el acero que le da rigidez, también crea tensiones internas (sobre todo a tracción) y altera el campo magnético natural. Esto afecta a la glándula pituitaria, responsable de la secreción de melatonina durante la noche, momento especialmente sensible para nuestro organismo, pues es cuando debe regenerarse. Estas tensiones además perduran en el tiempo alterando el campo vibracional. Además el cemento de tipo Portland está compuesto por cenizas volátiles y escorias siderúrgicas que dañan en diversos sentidos la salud ambiental. Al elevar el potencial eléctrico y radioactivo (debido a que es horneado a más de 1.450ºC) favorece la conducción del gas radón (gas radioactivo) que asciende desde el subsuelo (sobre todo donde hay rocas y mantos graníticos) y se acumula en los espacios inferiores de la vivienda.

El cemento además de tener un coste energético elevado (1,23Kw/Kg) tiene una vida útil más corta de lo esperado, sobre todo en aquellos lugares expuestos a alga conductividad, como son los cimientos, los cuales al estar enterrados se encuentran en presencia de humedad y alta conductividad, acelerando la descomposición molecular por “par-galvánico” y provocando la prematura oxidación de la ferralla en un lugar inaccesible, como es la cimentación y del cual no nos percatamos hasta que aparece un siniestro estructural.

Las alternativas al hormigón armado pasan por cal hidráulica armada con bambú o acero inoxidable. En aquellos casos que sea difícil adquirir cal hidráulica se pude sustituir por cementos naturales libres de cenizas volátiles y escorias siderúrgicas (como son por ejemplo los cementos Tigre, Pront de la casa Vicat, Puma, Zumaia o el “Mallorquín” o en su  defecto el cemento blanco BL-1ª.

Con un estudio de los recursos del lugar se pueden determinar los elementos naturales útiles sin limitar su perdurabilidad. Son factores  a valorar: la climatología, la insolación, la geología e hidrología, la pluviometría, los vientos dominantes, la biomasa forestal, los ecosistemas, etc.

El agua es el elemento primordial que condiciona la elección de un asentamiento y hoy en día es un recurso escaso. Por tanto, se tendrá un especial cuidado con el tratamiento de agua, su captación, acumulación, uso, depuración, reutilización y su retorno al medio natural. La captación es conveniente realizarla en una mina horizontal, de lo contrario deberemos buscar el nivel freático o una vena de agua, o bien canalizar y acumular el agua de lluvia. Los depósitos de agua deben encontrarse protegidos de la luz y el calor. Deben construirse con materiales naturales, y su uso debe ser responsable y austero. Es recomendable una separación eficiente entre las aguas grises (lavabos, fregaderos y duchas) y las aguas negras (inodoros) para depurarlas de forma biológica con posterior reutilización

Se trata de aprovechar la luz solar (insolación) como elemento primordial de iluminación y como fuente de energía para el calentamiento de paramentos y colectores solares. Del mismo modo se pude producir electricidad con paneles fotovoltaicos.

Se tendrán en cuenta los vientos dominantes, su intensidad, dirección y  temporalidad para adoptar sistemas de climatización basados en el principio de “presión diferencial en conductos de ventilación y refrescamiento”, también se evitaran posibles afecciones colocando pantallas biológicas.

Para la climatización natural se usaran elementos como son las masas forestales, lagunas, shunts termo solares, invernaderos, cubiertas verdes, etc. Han de utilizarse energías renovables aprovechables en ese lugar específico (como aerogeneradores, turbinas hidráulicas, paneles solares, biomasa, etc.) Y también se han de aprovechar los materiales constructivos del lugar.

Las formas de construcción contrarias a la destrucción del clima terrestre utilizan sistemas de captación solar pasiva, galerías de ventilación controlada y sistemas vegetales hídricos como reguladores de la temperatura y la humedad. También es útil la ventilación por shunt termo solar y con aleros con diseño adecuado. Los muros autoportantes aportan inercia térmica con aislamiento hacia el exterior. En fachadas con fuerte insolación con ventajosas las pantallas ventiladas, la vegetación perenne al Norte y la caduca al Sur, Este y Oeste. Si la climatología lo permite es conveniente incorporar cubiertas vegetales inundables. Los atomizadores para el ahorro de agua en los grifos y los que se utilizan para duchare deben ser termostáticos. El equipamiento del mobiliario también debe ser de bajo impacto ambiental y con diseño ergonómico. Los electrodomésticos han de ser de bajo consumo eléctrico, bajas emisiones electromagnéticas e iónicas y nulas en emisiones microondas y ondas gamma, etc. Han de tener toma de tierra adecuada que no emita gases nocivos y que sus elementos envolventes sean naturales. Además de la disposición óptima del mobiliario, también es importante el dominio de formas y contornos geométricos.

Después del estudio de los recursos naturales del lugar y de las necesidades individuales, sociales y ambientales a cubrir, se han de determinar los sistemas para obtener la energía necesaria. Algunos ejemplos son:

Solar térmica con paneles planos, concentradores o tubos de vacío para el agua caliente sanitaria y dar apoyo a la calefacción. También podemos producir frío con energía solar, geotermia, biomasa o biogás, mediante máquinas de absorción.

Con hornos solares y o concentradores parabólicos se obtiene la energía necesaria para la cocción de alimentos en más de un 75% de días.

Geotermia en los lugares con el suelo templado que tengan aproximadamente alguna vena magmática y/o vapor procedente del subsuelo, mediante intercambiadores para todo tipo de tratamientos térmicos como los que cubre la solar térmica

Biomasa procedente de residuos agroforestales para el apoyo a la Solar-Térmica

Biogás procedente de los digestores anaeróbicos de las EDAR para el apoyo a la Solar-Térmica

Solar fotovoltaica para la producción de electricidad

Hidráulica para la generación de electricidad y para las máquinas que requieran de una fuerza motriz. Su uso debe considerarse restringido a aquellos lugares donde su impacto ambiental sea mínimo

Eólica con similares funciones que la hidráulica. Su uso debe ser restringido a aquellos lugares donde su impacto ambiental sea mínimo.

Recuperación de residuos y la depuración de vertidos. Es importante la separación de residuos en origen, un programa de reciclado y si es posible la reutilización de los sólidos inorgánicos así como el compostaje de los sólidos orgánicos. Hay que dar una especial atención a la depuración de las aguas residuales para su posterior utilización. En los lugares con gran escasez de agua se deben incorporar sistemas de deshidratación orgánica o “wc secos” con su posterior programa de compostaje.

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