La deshidratación es un método de conservación de alimentos por secado. Los alimentos se someten a aire caliente a baja temperatura durante un tiempo determinado para extraerles el agua. Una práctica que existe desde la antigüedad.
Actualmente hay un auge e interés por redescubrir este método de preparación de alimentos.
Ecología: Conservar alimentos como se ha venido haciendo a lo largo de la história y para reducir el despilfarro de alimentos y embalajes de los productos comercializados.
Economía: Ahorrar dinero. Los alimentos deshidratados no son económicos. Conocemos muchas madres que deshidratan fruta para sus hijos para convertirlas en saludables golosinas. Son madres de hijos alérgicos al glutenque no pueden consumir golosinas convencionales. Su bolsillo se resiente adquiriendo deshidratados. Aunque parezca extraño nos hemos encontrado con muchos casos como este.
Salud: Deshidratando a baja temperatura conservamos los nutrientes de los alimentos. Los maestros en deshidratación son los practicantes de la dieta crudivegana que exploran en la esta técnica para ampliar la gama de elaboraciones (panes, galletas, bases de tartas, crackers…) gracias a la riqueza de texturas, sabores y colores que permite.
No todo son alabanzas. También hay inconvenientes, como: su volumen, ruido, consumo y coste inversión. El deshidratador es el electrodomésticomenos evolucionado. Con el auge que está adquiriendo los fabricantes se veran obligados a perfeccionar la precisión de temperatura y la uniformidad en el deshidratado, dos de los inconvenientes más comunes en los deshidratadores actualmente.
El deshidratador más económico y duradero es el sol. También encontramos secadores solares. En René tenemos una amplia oferta de deshidratadores: analógicos, digitales que secan por resistencia o bien por infrarrojos. Recientemente también existe la opción horno y deshidratador.
Es un utensilio tan sencillo que es muy fácil de fabricar. Os presentamos uno muy asequible, diseñado por Sandra Galvé, nutricionista y fiel seguidora de nuestro proyecto. Con unas maderas, un ventilador de ordenador, 2 bombillas de 25 w, un termómetro y un poco de ingenio y sentido común fabricó uno con sus propias manos . Hace tiempo que os lo queríamos enseñar como curiosidad y alternativas al consumo. Gracias a las fotos que nos envió podéis imaginaros el funcionamiento bàsico de un deshidratador.